domingo. 12.05.2024
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Sergio Sánchez: "el monumento refleja los rasgos duros de Niño Migué y su mirada penetrante"

El monumento al Niño Migué se inaugura mañana a las 18:00 horas, en la Plaza que lleva su nombre, dentro del Parque de los Olivos del barrio de La Orden
Sergio Sánchez: "el monumento refleja los rasgos duros de Niño Migué y su mirada penetrante"

Sergio Sánchez, autor de la escultura del Niño Migué que se inaugura mañana en La Orden, asegura haber esculpido a "mi Miguel, al que conocí en Tharsis en 2009". El artista coloca en esa fecha el inicio de un trabajo que culmina mañana a las 18:00 horas con la inauguración en el Parque de los Olivos de una escultura a tamaño natural de Miguel Vega de la Cruz, un homenaje que se enmarca dentro del II Festival Flamenco de Huelva.

"Recuerdo el día en que Miguel modeló para mi como uno de los más bonitos de mi carrera profesional" declara Sergio, recordando los inicios de un proyecto encargado por los miembros de la peña flamenca de La Orden, que después de que el pasado mes de diciembre se aprobara por acuerdo plenario del Ayuntamiento de Huelva verá finalmente la luz mañana. "Sólo paraba de tocar la guitarra cuando yo le pedía que lo hiciera para tomar medidas de su rostro" recuerda el artista.

El escultor ha realizado un trabajo concienzudo para reflejar  no sólo a un artista de la guitarra, sino a "un personaje de Huelva que permanece en la retina de todos". El resultado es un monumento a tamaño natural de 280 kilos en bronce en la que Niño Migué está sentado en una silla con su eterna compañera, la guitarra. "He tenido incluso un traje de Miguel para estudiar las arrugas que en él hacía su cuerpo", relata Sergio para mostrar la minuciosidad con la que ha trabajado, intentando reproducir la postura encorvada del artista al tocar la guitarra, la vestimenta con pantalones acampanados, la bocas de las mangas anchas, y "su mirada penetrante y la dureza en el rostro de todo lo que vivió y de la concentración al tocar la guitarra".

"Nadie podrá decir que la pieza no es correcta, luego habrá gustos personales, pero todo ha estado muy estudiado, muy amarrado, nada se ha dejado a la imaginación" declara Sergio quien asegura que el haber conocido personalmente a Miguel, verlo tocar la guitarra, y la colección de 600 fotografías con las que ha contado les han servido de inspiración para crear la obra.

De la personalidad de Niño Migué destaca su espíritu extremadamente bohemio, "no podía vivir sin la guitarra", además de un valor con el que se siente identificado, la humildad.

Esculpir al Niño Migué ha supuesto para él salirse de lo que habitualmente hace, la imaginería, y tener su primer monumento en la ciudad, por lo que asegura haberlo trabajado "con una ilusión grandísima".