La Reina de las Colonias impone devoción en la capital

La Hermandad de la Sagrada Lanzada, con varios estrenos para este esperado Martes Santo, demuestra que el sentimiento de la barriada es extensivo a toda la ciudad

Pasadas las cinco y media de la tarde de este Martes Santo, desde la barriada de Las Colonias hacía acto de presencia en la calle la Hermandad de la Sagrada Lanzada. Una Hermandad que tras celebrar Cabildo de Elecciones hace unos meses, hace su Estación de Penitencia con una nueva junta de gobierno que encabeza como Hermano Mayor Juan Romero. Han preparado su salida procesional con mucho esmero y desde primeras horas de la mañana mantenían en perfecto orden todas las insignias que están procesionando en el cortejo, así como mantenían un perfecto orden para dar el mejor de los recibimientos a todos los hermanos y devotos que acudían a visitar los pasos ya exornados de forma delicada.

Sorprendía en esa salida los rotundos y continuos aplausos ante la salida de los pasos. El paso de misterio deslumbraba con el estreno de la crestería y el dorado de las cartelas de los cuatro Evangelistas, así como el tocado de la Virgen del Patrocinio que ha sido donado por la cuadrilla de costaleros. Pero es en la salida del palio donde los gritos de vivas rompían la tarde que estaba cargada de fervor. Un paso de palio que estrenaba algunos candeleros nuevos, pero en el que se trabaja desde una comisión de hermanos para que en no mucho tiempo podamos ver a Ntra. Sra. De los Dolores bajo un palio bordado en oro y sobre una peana de plata.

Para una devoción así, no hay trabajo que se considere esfuerzo, ni esfuerzo que se considere sacrificio, porque por ella es posible todo al tratarse de una Madre, hecha Reina de Las Colonias y que lleva por nombre Dolores.