jueves. 28.03.2024
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La UHU concluye la celebración del 8-M con un monólogo de Pamela Palenciano

La joven jiennense llena de risas y aplausos el salón de actos de la Facultad de Ciencias del Trabajo con ‘No solo duelen los golpes’
La UHU concluye la celebración del 8-M con un monólogo de Pamela Palenciano

La Universidad de Huelva, a través de su Dirección de Igualdad y Atención a la Diversidad, ha puesto el colofón al nutrido programa de actos en el marco del 8 de Marzo, con una visita muy especial y que ha levantado mucha expectación entre las mujeres de la comunidad universitaria, desde docentes a alumnas, como a ciudadanas onubenses en general, pertenecientes o no a la Onubense.

El Salón de Actos de la Facultad de Trabajo Social y Ciencias del Trabajo ha registrado un lleno absoluto para asistir al monólogo de la joven jiennense y activista feminista Pamela Palenciano, titulado ‘No solo duelen los golpes’, donde ha dado cuenta de las desigualdades de género que conlleva el sistema heteropatriarcal, y de la “lucha que todavía nos queda por delante”.

Entre los asistentes, además de un gran número de alumnas y alumnos de la Onubense, se encontraban también mujeres pertenecientes a asociaciones como Lazareto o el Grupo Japón de Huelva, así como numerosos vecinos onubenses ajenos a la comunidad universitaria.

“Una visita muy especial”, ha calificado una “emocionada” directora de Igualdad y Atención a la Diversidad de la Onubense, Cinta Martos, que ha señalado que la Universidad de Huelva ya intentó contar con la presencia de Palenciano el pasado año, y que este año por fin lo ha logrado para “poner el colofón a la intensa programación que hemos diseñado desde la Dirección de Igualdad de la Universidad de Huelva”. No sólo ha sido especial para la institución académica, sino también para la propia Palenciano, quien ha reconocido que ésta era su primera visita a Huelva.

“Teníamos muchas ganas de traer a Pamela, que nos trae, en clave de humor y con un fuerte mensaje reivindicativo, un mensaje que seguro llegará a jóvenes y mayores, a todo el público”, especialmente “teniendo en cuenta que vivimos en un tiempo en el que se vuelve a cuestionar el feminismo o la violencia de género”. Por esta razón, “el mensaje que nos traslada Pamela Palenciano es importante y puede servir de ejemplo y para remover conciencias, ya que ella misma ha sufrido en sus carnes la experiencia de la violencia de género con una ex pareja”.

Cinta Martos ha querido agradecer y destacar igualmente la “alta participación” que han logrado registrar los diferentes actos de la Universidad de Huelva programados en torno al 8-M, e incluso el Salón de Actos de la Facultad de Ciencias del Trabajo “hasta se ha quedado pequeño ante la demanda”. Por último, ha invitado al público a reflexionar sobre las palabras de la invitada: “Escucharla te remueve”.

Denuncia a través del humor y sin pelos en la lengua

Aunque conocida por muchas y muchos de los que llenaban en el auditorio, Pamela Palenciano no dejó indiferente a nadie, y en el mismo inicio de su monólogo ya dejó claro su estilo directo, vehemente, denunciante, reivindicativo, enérgico y de muchos aspavientos, sin pelos en la lengua, y todo en clave de humor. “Sería fácil hablar de la desigualdad y los privilegios desde el drama o la violencia, enseñando la parte más dramática, pero con humor el mensaje llega más, y los argumentos son irrebatibles”, manifestó. Durante su intervención, arrancó risas y aplausos constantes de un público que empatizó con la invitada desde el primer minuto.

“Os lo aviso, voy a ser soez”. Es lo que advirtió al público –el mismo que agotó las más de 250 plazas del salón de actos en pocos días–, y, fiel a su estilo, no se cortó a la hora de transmitir su experiencias y su visión del mundo. Agradeciendo en primer lugar la invitación de la Universidad de Huelva y la posibilidad de visitar la capital onubense por primera vez, y consideró importante la presencia de tanta juventud para escuchar, en tono ameno y humorístico, su mensaje sobre “las desigualdades y privilegios, de mi historia con mi primer novio, en definitiva, que esto sirva para que la gente pueda mirarse en sus espejos en su vida cotidiana”.

Pamela Palenciano quiso dejar claro que “el machismo, por desgracia, está muy interiorizado en la sociedad, entre todos y todas y tenemos que deconstruirlo”. Y quiso ejemplificarlo en diferentes situaciones cotidianas en las que se dan relaciones de hombres y mujeres, de parejas y ex parejas, en la educación de los niños y las niñas o en las relaciones paternofiliales en función del género. Igualmente, habló de las desigualdades y privilegios que no sólo existen en la relación entre hombres y mujeres, sino también en función de la “suerte de haber nacido en el primer o el tercer mundo o de haber nacido blanco o negro”. Palenciano describió el “mundo azul” que ha construido la sociedad en torno a lo que debe ser el género masculino, y el “rosa” que pertenece a las niñas y las mujeres.

Una situación que calificó que “opresión”, que “no es únicamente del hombre hacia la mujer, sino también del hombre hacia el propio hombre, que debe cumplir los cánones del macho-alfa”.

Uno de los puntos en los que más se detuvo fue en las relaciones entre chicos y chicas jóvenes, donde ya se dan situaciones de dominación (“diez whatsapps en un minuto”), o sobre el concepto de masculinidad y feminidad tergiversado.

Pamela Palenciano se postula contra los “cuentos de príncipes y princesas”, defendiendo que el machismo y el heteropatriarcado son un constructo social, y sostiene que “todo lo que se aprende, puede desaprenderse”.