sábado. 20.04.2024
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Preocupa la estabilidad del trazado de la carretera A-461 por las voladuras mineras

Las continuas voladuras de mina que se realizan en el trazado del Mirador y Cerro Colorado obligan a cortar la vía de la Cuenca Minera de forma recurrente. El pleno rendimiento de la explotación engulle una carretera por la que pasan más de mil vehículos cada día
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Preocupa la estabilidad del trazado de la carretera A-461 por las voladuras mineras

Los cortes recurrentes por voladuras en mina que se están haciendo en la carretera A-461 a su paso por Minas de Riotinto están dejando al descubierto una situación de riesgo que ya está siendo advertida por los conductores que habitualmente usan esta importante vía de comunicación de la Cuenca Minera.

Desde que el Proyecto Río Tinto se puso en marcha y luego a pleno rendimiento en los dos últimos años, parte del trazado de la A-461 ha quedado literalmente engullido por la explotación minera. Especialmente visible es esta situación en la falda del Mirador de Cerro Colorado y las zonas de la explotación conocidas como Torre de Babel, precisamente donde se colocan visitantes y excursionistas para contemplar en todo su esplendor la explotación minera. Aquí se desarrollan las potentes voladuras del terreno que provocan una evidente modificación del paisaje, el horizonte, el skyline de la mina de Riotinto.

Los ayuntamientos ya están optando por avisar previamente a los ciudadanos cuando se van a producir cortes en esta vía a consecuencia de las voladuras mineras, a todas luces necesarias para la vida productiva de la mina y obligatorios por el uso de material explosivo.

Basta recorrer el corto trayecto de la A-461 que va desde Riotinto hasta el cruce de Campofrío para percatarse del riesgo que entraña pasar por aquí, una zona que al uso de explosivos y el continuo lavado y laminado de las paredes y taludes verticales debido al laboreo hay que unir el importante tráfico que soporta a diario, el tránsito interno de los enormes camiones de la compañía minera, los de transportes de mineral que la atraviesan rumbo al Puerto de Huelva y los vehículos en ruta con destino al vertedero de Nerva procedentes de Huelva y comarcas vecinas.

Hace unos meses, la Consejería de Fomento de la Junta de Andalucía realizó importantes obras de mejora en esta carretera regional pero en ellas, al margen de la mejora evidente del piso y la eliminación de baches, no se realizó ni habilitó ningún desvío para evitar a los conductores atravesar la explotación.

Según cifras facilitadas por la propia Consejería, unos 20.000 ciudadanos usan asiduamente esta carretera, una importante vía de comunicación que une las comarcas serrana y minera y conecta también la Nacional-435 en el cruce de Zalamea con la Ruta de la Plata, la A-66,que lleva a Extremadura y al norte. Fomento tiene contabilizados una media diaria de 1.036 vehículos, un 8% vehículos pesados.

La Junta de Andalucía encargó en su día la redacción de un proyecto de conversión de parte de esta carretera de 54 kilómetros de longitud en autovía, denominada desde entonces Autovía de la Cuenca Minera Zalamea-Santa Olalla del Cala. El proyecto quedó varado desde el estallido de la crisis en 2008 y los continuos recortes y ajustes en las cuentas regionales destinadas a mejora de infraestructuras.

La carretera A-461 ya tuvo que ser cortada el pasado invierno debido a desprendimientos en el punto kilométrico 45, muy próximo a la zona en cuestión. En esa ocasión se debió a las intensas lluvias caídas.