viernes. 29.03.2024
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El Gobierno accede a la petición de UPA de adelantar la llamada del contingente de temporeras marroquíes

Supone adelantar en casi dos meses la petición del contingente marroquí que viene por primera vez a la campaña, que representa la tercera fase de la petición de temporeros y que este año se hará a finales de año, cuando el año pasado fue a finales de enero para que acudieran avanzado marzo.
El Gobierno accede a la petición de UPA de adelantar la llamada del contingente de temporeras marroquíes

El Gobierno ha accedido a la petición de la organización agraria UPA de adelantar el proceso de llamada del contingente que se desplaza en origen desde Marruecos y mejorar las selecciones de personal allí. Así lo ha adelantado a diariodehuelva.es el secretario general de UPA Huelva, Manuel Piedra, quien ha destacado "la respuesta rápida del Gobierno, que ha demostrado una gran sensibilidad con la inmigración".

Dicha respuesta -más de una quincena de folios- de la secretaria de Estado de Inmigración, Consuelo Rumí, se produce unos días después haber mantenido una reunión con representantes de UPA y en ella se accede a la petición de la organización agraria de adelantar en casi dos meses la petición del contingente marroquí que viene por primera vez a la recogida de la fresa y los frutos rojos, que representa la tercera fase de la petición de temporeros y que este año se hará a finales de año, cuando el año pasado fue a finales de enero para que acudieran bien avanzado marzo.

Según explica Piedra, la petición de temporeros se realiza en tres fases: una primera en la que se hace un llamamiento al contingente nacional (españoles y extranjeros asentados en España) para saber cuántos están interesados en venir a la recolección, algo en lo que se está trabajando ya para cerrar la agenda en agosto. Estos temporeros se incorporan a la campaña de recogida mediados de febrero.

Un segundo llamamiento, en el que se incluyen a jornaleros de Europa del Este y marroquíes -principalmente mujeres- que hayan venido al menos dos años antes y que acuden a la recolección a principios de marzo. Y la tercera fase, ya mencionada, que el año pasado supuso unas 11.000 jornaleras que llegaron a los campos de la provincia de Huelva el 21 de marzo.

Aún no se sabe con exactitud el contingente de temporeros que hará falta para la próxima campaña. Manuel Piedra señala que en octubre se hará un recuento de las hectáreas que se han plantado de cada fruto -fresas, frambuesas, moras y arándanos- y en base a ello se calculará el contingente necesario, que dependerá también de las condiciones meteorológicas. El secretario general de UPA Huelva y miembro de la Ejecutiva Federal de la organización apunta que en plantación de fresas (unas 6.000 hectáreas) "poco podemos crecer porque no hay mucha más tierra para plantarlas, sí podemos crecer en otros frutos como el arándano" (hay unas 11.000 hectáreas dedicadas al resto de frutos rojos).

Las otras dos luchas de UPA

Manuel Piedra ha señalado que la organización agraria mantienen dos luchas importantes: La petición de unos precios justos porque "no se puede consentir que el arándano se le pague al agricultor a 3 euros el kilo, algo insostenible y se venda al consumidor a más de 20 euros"; y la exigencia de más vigilancia en los campos para evitar robos "con independencia del color político del Gobierno porque más de 80.000 personas viven de la fresa y los frutos rojos".

Los datos de la anterior campaña

La campaña de recogida de la fresa ha terminado este año con una producción de 280.300 toneladas, lo que supone un descenso del 8% respecto a la campaña pasada, pese a que las hectáreas plantadas aumentaron en un 9%, según informó en un comunicado Freshuelva (Asociación de Productores y Exportadores de la Fresa de Huelva).

La producción de frambuesas ha sido de 19.170 toneladas, lo que supone un aumento del 2% respecto a la campaña anterior. El precio de este fruto rojo, en un cambio de tendencia respecto al año anterior, aumentó una media del 4%. La producción de mora ha sido un 3% superior a la del año anterior, con un total de unas 1.800 toneladas, aunque el precio descendió en un 5%. El arándano ha estado marcado por un incremento de superficie cultivada en esta campaña, el 12% concretamente, lo que ha provocado que los volúmenes comercializados se hayan incrementado en un 15% prácticamente