El Gobierno no abrirá una investigación por la presunta paliza a un preso de Huelva
Instituciones Penitenciarias se va a mantener al margen, por el momento, de la denuncia efectuada ante los tribunales por la presunta paliza efectuada a un preso ingresado en la cárcel onubense y que denunció haber sido objeto de una brutal paliza por parte de seis funcionarios de prisiones.
Según han señalado fuentes de Instituciones Penitenciarias a diariodehuelva.es desde el Gobierno se enteraron por este periódico de la denuncia formulada tras lo cual han señalado que, "al seguir ya una vía judicial" esperarán al dictamen de la investigación judicial y no tienen previsto abrir una investigación interna por lo sucedido.
Desde Instituciones Penitenciarias, han señalado que de haberse producido una denuncia ante el juez de vigilancia penitenciaria, o una queja dentro de la propia prisión, hubiera sido más probable la apertura de una investigación más a fondo por parte de la propia administración de servicios penitenciarios, pero al haberse utilizado la vía judicial en un jugado de instrucción convencional, se va a esperar a ver las conclusiones e indagaciones del juez.
Sin embargo, el hermano de la víctima, que fue el encargado de desplazarse desde Málaga para realizar la denuncia, ha asegurado en declaraciones a este periódico que ya alertaron a la trabajadora social de esta circunstancia y que su súplica no fue escuchada de manera interna en la prisión y que, igualmente, en primer lugar acudieron a un juez de vigilancia penitenciaria para denunciar el caso, pero que éste les envió hacia la justicia ordinaria.
Sin ayuda médica
Según relata el hermano de la presunta víctima. Como consecuencia de la paliza (en la que presuntamente ataron de pies y manos al preso para golpearlo con puñetazos y patadas) el reo permaneció durante bastantes días con el cuerpo amoratado y graves dolores de cabeza y pese a que requirió asistencia médica se la negaron.
Esto propició que el propio hermano de la víctima se personara en la prisión para pedir asistencia médica a su hermano, algo que le prometieron que harían pero que "tras haber hablado con mi hermano me asegura que no lo ha visto el médico".
Según el relato del hermano del reo, el pasado día 26 de noviembre por la noche a V.C.P. seis vigilantes "lo sacaron de la celda, lo amarraron de pies y manos y empezaron a darle patadas y puñetazos" una paliza que le habría dejado el cuerpo "totalmente amoratado".
Según la denuncia, el reo pidió asistencia médica para ser atendido de sus heridas pero no se la prestaron e incluso, "lo dejaron amarrado en una cama toda la noche y desnudo completamente".
