viernes. 29.03.2024
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Opinión

Más frustración

Las imágenes y situaciones vividas en el pseudo referendum del 1 de Octubre, sin censo ni garantías, son de las más tristes y preocupantes, desde que se instauró el régimen constitucional del 78.

Las imágenes y situaciones vividas en el pseudo referendum del 1 de Octubre, sin censo ni garantías, son de las más tristes y preocupantes, desde que se instauró el régimen constitucional del 78. 

Pero ,¿como hemos llegado hasta aquí?, en primer lugar por la inacción del Gobierno presidido por Rajoy. De todos es conocida su faceta para dejar pasar el tiempo,a  la hora de resolver un problema, es el conocido como “ Código Mariano”. Hasta ahora le ha funcionado, tanto en su partido en las diferentes luchas internas que le rozaron, como tras la elecciones pasadas hasta ser elegido Presidente, por la incapacidad de otras fuerzas políticas para llegar a un acuerdo. Pero en esta ocasión no ha funcionado, y hoy tenemos un problema grave y con unas posiciones cada vez más polarizadas. En segundo lugar, por la postura de máximos a la hora de negociar, de la Generalitat, en un proceso cargado de irregularidades, sin contar con la mitad de la sociedad catalana. Bajo el pretexto de que todo el que no sea independentista se le etiqueta como “los otros”, fomentando un odio injustificable a todo lo considerado como “Español”. Puigdemont, Junqueras y sus aliados, no pueden vincular unas cargas policiales,a  la legalidad de un referendum, sin ningún tipo de garantías. El fin no justifica los medios. Las banderas, no entienden a razones. 

En este coche de trenes,el Gobierno se ha escondido primero en la vía judicial para resolver los problemas, con instrucciones de la fiscalía o autos, y después en la vía policial con el envío de Policías y Guardias Civiles, a Cataluña para impedir la consulta. “ No habrá urnas el 1 de Octubre” dixit Rajoy y Soralla, entre otros miembros del gobierno. Y al final las hubo, con imágenes de actuaciones policiales, donde se perseguían urnas, ante la resistencia más o menos pasiva, según los casos de parte de la ciudadanía catalana, ojo no toda, que no fueron a mayores gracias a la proporcionalidad y profesionalidad en la actuación de los cuerpos policiales o a la pasividad de los concentrados. Sin duda el escenario más propicio para las organizaciones independentistas, de las que se hacían eco los medios de comunicación globales, la conocida como internacionalización del conflicto, el deseo del Puigdemont, que ya tenía el pretexto para dar el paso hacia su hoja de ruta, un camino hacia el abismo. 

El poder consiste en definir las cosas. Y actualmente solo le quedan dos vías a Rajoy: O la aplicación del artículo 155, cuanto antes, como solución a corto plazo . O negociar, dentro de la Ley con todos, sin exclusiones. 

Muchas personas asistimos con preocupación y tristeza, por las imágenes tan lamentables que nos dejó el 1 de Octubre. Es necesario más diálogo y sentido, para no ahondar más todavía en la fractura social en la que nos han metido, unos políticos cerrados en sus posiciones de máximos. Pese a la torpeza del Gobierno a la hora de gestionar la crisis, a la Generalitat se le ha ido de las manos las protestas, con la intimidación a periodistas, fuerzas de seguridad y políticos contrarios a la independencia. 

En unos días saldremos de dudas, sobre el camino de los acontecimientos. A estas alturas no se puede ser muy optimista, cuando las posiciones están más radicalizadas todavía, sobre todo entre los soberanistas. Cataluña no conseguirá la independencia, generando más frustración para los independentistas. La posibilidad de una consulta pactada en un futuro, podrá ser o no la solución, y asimismo generará frustración para los contrarios a esa vía. Y como hace algo más de un año, todo apunta al :“ si no tengo el apoyo de los diferentes grupos políticos, convoco elecciones”, ¿ les suena?.