viernes. 29.03.2024
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La Guardia Civil descubre en la Sierra de Huelva una masacre de ciervos por furtivos

La Benemérita investiga al propietario de una finca en Alájar tras el hallazgo: 15 ciervos muertos, 12 de ellos colgados sin cabeza y sin vísceras
La Guardia Civil descubre en la Sierra de Huelva una masacre de ciervos por furtivos

La Guardia Civil investiga al propietario de una finca, por su implicación en un delito contra la flora y fauna, tras haber intervenido 15 ciervos cazados ilegalmente en la localidad de Alájar. Dicha operación se ha llevado a cabo dentro de las acciones que se desarrollan por la Guardia Civil para prevenir la caza furtiva.

En el transcurso del servicio, los agentes se dirigieron a un punto de la Sierra perteneciente al término municipal de Alájar donde esa misma tarde se habían escuchado tiros, no observando nada extraño por lo que continuaron la vigilancia por la zona, interceptando un vehículo que circulaba a gran velocidad y que accedió a una finca.

Una vez dentro de la finca, fueron identificadas cinco personas. El primero fue al conductor del camión, otro varón que portaba un rifle, un varón al que se le intervino un cuchillo y al propietario de la finca y a su hija.

Además junto al citado vehículo, los agentes observaron tres reses de caza, siendo estas dos ciervas y una cría de cierva, así como un cuchillo de despiece y un casquillo de munición metálica con restos de sangre por lo que se solicitó al dueño de la finca que mostrara los permisos que amparan las reses abatidas en el suelo.

Comprobada la documentación se pudo observar que las piezas cazadas no se correspondían con lo expedido, ya que los permisos autorizan la caza de ciervo macho y no de hembras ni tampoco de crías.

También se inspeccionó una nave, donde se localizó un camión frigorífico habiendo en su interior 12 ciervos colgados sin cabeza y sin vísceras careciendo de todo tipo de precinto identificativo y sin poder saber si los mismos son hembras o machos.

Ante tal circunstancia se le informó al propietario que según la autorización mostrada los animales que se abaten en dicha finca no pueden ser objeto de comercialización y que a los mismos no se les puede quitar la cabeza ni las vísceras sino se encuentra un veterinario presente que extienda el precinto, procediéndose al precintado del camión y a la incautación de los 15 animales.

Por todo ello se ha procedido contra el propietario de la finca por su implicación en un Delito Contra la Flora y la Fauna al ser la persona autorizada en los permisos y consentir la caza ilegal, siendo remitidas las Diligencias Instruidas a la Autoridad Judicial competente.