sábado. 20.04.2024
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"Gastamos tres extintores pero al final tuvimos que salir corriendo"

Un brasero fue la causa del incendio que asoló este piso de la sexta planta. El fuego ha afectado a una vivienda de la quinta planta cuyo dueño no pudo dormir en su habitación habitual
"Gastamos tres extintores pero al final tuvimos que salir corriendo"

Miguel  Pinzón se siente hoy afortunado, apenas horas después del incendio que asoló la vivienda de arriba, está entero y agradecido y eso que su casa también ha sufrido daños estructurales en su dormitorio "He pasado la noche en otra habitación, el técnico municipal  me dijo que no entrara porque había peligro".

El incendio de la sexta planta en el número 19 de la calle Roque Barcia provocó gran ansiedad en este vecino de la quinta planta, "apenas hubo tiempo para reaccionar, solo escuché a una chica gritar, al principio pensé que era violencia de género pero luego abrí la puerta y me di cuenta que había mucho humo".

IMG_6848 incendio en Roque Barcia

Miguel fue valiente en ese momento, rompió el cristal para acceder al extintor de su escalera y subió al piso de arriba, "gasté dos extintores y otro vecino vino también con otro para echar una mano, pero al final tuvimos que salir corriendo".

Al día siguiente las tres chicas parecen estar bien, "han estado por aquí, llorando", pero finalmente no ha habido heridas graves. Según han comentado las propias perjudicadas a los vecinos, la causa del incendio ha sido un brasero, "se fueron a la cocina a hacer la cena y cuando se dieron cuenta ya el fuego estaba muy avanzado". Una de ellas finalmente tuvo que ser rescatada por un patio.

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Según asegura Miguel, al final todos bajaron las escaleras excepto algunos vecinos de las plantas superiores que subieron a la azotea para estar más lejos del peligro. Sólo dos de ellos incumplieron la recomendación, Marcos Gómez y su novia, vecinos de la octava planta, los únicos que bajaron las escaleras cruzando el fuego del sexto piso:

Marcos asegura que: "Escuchamos gritos, abrimos la puerta y vimos que entraba humo. Entonces abrimos el balcón y vimos las llamas en el sexto. Cerramos la ventana del balcón y salimos corriendo para abajo por las escaleras sin luz y tragando humo y sin saber si realmente debíamos bajar ni si seríamos capaces de llegar vivos, pero la opción de quedarnos en el piso mi pareja y yo la vimos más peligrosa".