La escultura del Carmen de Punta se desploma sobre un niño de 9 años
El menor sufre fuertes contusiones en varias zonas del cuerpo
El Parque de la Virgen del Carmen de Punta Umbría parecía un lugar de reunión ideal para todos los públicos, especialmente para los niños, al ser un recinto completamente vallado y sin peligro de escape. Sin embargo, la estancia en esta zona de ocio y esparcimiento tuvo este pasado domingo 19 de junio unas graves consecuencias que a punto estuvieron de ser incluso mayores.
La escultura dedicada a la imagen que da nombre al parque sufrió el desplome de una de sus placas laterales de mármol justo en el momento en que un niño de nueve años se encontraba junto al monumento. La placa, de unos dos metros de altura y 50 centímetros de ancho, cayó sobre el menor, que sufrió fuertes contusiones en el dorso y en las piernas y durante uno momentos quedó atrapado bajo la lámina de gran tamaño.
Las consecuencias pudieron ser peores si no es por la rápida actuación de algunos mayores que se encontraban en el parque, quienes, tras ser alertados por otros niños y niñas que estaban celebrando un cumpleaños junto a la víctima, pudieron quitarle de encima inmediatamente la placa de mármol. Otro factor que ayudó a aminorar la gravedad del suceso fue la valla de madera que rodea a la escultura, que sirvió para amortiguar la caída de la lámina.
El pequeño fue trasladado a continuación al centro de salud de Punta Umbría, donde fue atendido en el Servicio de Urgencias y derivado posteriormente al médico de familia, quien a continuación lo derivó al Hospital Juan Ramón Jiménez de Huelva. Según el informe médico del centro hospitalario, al que ha tenido acceso el diariodehuelva.es, el menor sufre policontusión y un esguince en el tobillo izquierdo.
La madre de la víctima, Noelia Walls, aún no puede quitarse de la cabeza el momento en que vio a su hijo en el suelo, “temblando” y con un “ataque de ansiedad”, asegura. Tampoco puede dejar de pensar en “lo que hubiera podido pasar” si no es por la valla de madera y por la ayuda de otros mayores, al tiempo que lamenta que el pequeño “aún está traumatizado”. “No deja de repetir que no podía respirar y que me salvaron la vida”, añade.
