Beatriz Romero. Una voz para el sentimiento

No desearía que mis sentimientos nublaran mis palabras. No quisiera que la amistad y cariño con los que me honro con esta magnífica señorita de la canción interfiera en la realidad de mis letras.

Y no va a ser así. Creo que es la cuarta entrevista que le hago a Beatriz Romero. La última fue hace un año a raiz del grandísimo éxito que obtuvo en la presentación de su primer disco en el Gran Teatro de Huelva, con una puesta en escena que pocas veces se ven por estos lares. Era una noche fría y ventosa y llevaba el corazón encogido por la muerte de mi padre un día antes, pero no me podía perder esa cita tan ansiada. La sala llena y subía los escalones para camerinos en silencio. En uno de las salas allí estaba ella, como una reina, dejándose peinar, relajada y tranquila. Me mira con ese rostro de niña guapa y buena y con sus ojos me dice gracias. María José, su madre, y José Antonio, el padre, se movían nerviosos como autómatas, mientras que Rubén, su media naranja, me contaba sus cuitas sobre el malhumor que su novia disparaba sobre él. Salimos al patio de butaca para ver el ambiente. El lleno era absoluto,. De pronto en la oscuridad de la sala se abrió el telón y comenzó el sueño. Aquél disco con su nombre, Beatriz Romero, tuvo una acogida sensacional entre el mundo del flamenco. Durante mucho tiempo se habló, y se sigue hablando de él, por los circuitos o tertulias flamencas, por las peñas de toda España. Su disco es puro pero con innovaciones de lo clásico sin perder la esencia de los distintos palos del cante. Y lo importante de esta cantaora no es ya su voz o personalidad artística, que lo es, sino su madurez personal que le hace plantearse su futuro con una seguridad y firmeza impropia para su edad. Comenzó sus estudios de Derecho compaginándolo con sus actuaciones casi todos los fines de semana por cualquier lugar de España y este año entra en el curso que la diplomará previamente a conseguir la ansiada Licenciatura y, si lo ve factible entonces, opositar a Fiscalía. ¡Ahí es ná!
Y esta mañana, después de un año sin verla, me encuentro con una chiquilla hecha mujer y más linda que antes, si cabe. Nos sentamos en el interior de la cafetería Le Petit Café y le pedí que me contara qué me había perdido durante el último año. Su sonrisa siempre está a flor de piel, fresca y hermosa. Me quedo sorprendido cuando me cuenta que ha actuado en Grecia por medio de una invitación personal de un  productor griego que conoció en El Rocío y quedó prendado de su voz y de su cante. Actuó en el Teatro Trianón de la capital griega, Atenas, sorprendiéndose como el público heleno que llenaba el aforo aplaudía a rabiar los diferentes cantes de la palerma. Además, ha actuado en el Festival de Lo Ferro, en Murcia, junto a Marina Heredia, sin dejar en demérito el clásico periplo por la geografía española en  festivales y peñas flamencas, Además de ello , resultó ganadora del Premio Joven del Concurso Nacional “El Yunque”, de Cataluña. Igualmente, en el mes de junio consiguió el “Colón Flamenco” de la Peña Flamenca de Huelva.
Pero no se queda en esto la carrera discográfica de Beatriz Romero. Su futuro marcha en relación a la calidad que atesora y el renombre que su figura tiene en letras de molde en este mundo del cante.  Lo más eminente, en concreto el próximo martes 8 de marzo, en la iglesia de Las Agustinas , participará junto a su gran amiga Ana Maria Bernal, en La Exaltación de La Saeta organizado por Hipercor y el diario onubense Huelva Información. Posteriormente, este Jueves Santos se traslada hasta Barcelona para actuar junto a Diana Navarro y Antonio Cortés, en la localidad barcelonesa de Sant Vincent dels Horts. Y como corona del año profesional que se le avecina tiene pendiente la actuación el día 21 de septiembre en la ciudad austriaca de Viena. En el teatro Auditorio de Radio Televisión Austriaca. y de allí a una más que posible gira por diferentes capitales europeas. Un templo de la música en general para una joven cantaora de diecinueve años acompañada de sus músicos, sólo y exclusivamente para ellos. Todo un lujo para Huelva y un orgullo para todos que la conocemos.
Pero mientras tanto, me dice como si lo conseguido fuera poco y lo de por venir pequeño, Beatriz Romero no se cansa de buscar un momento de descanso en sus estudios para proseguir con su promoción profesional. Por ello, conociendo el poder de las redes sociales y la influencia de las mismas se ha inscrito en el “Concurso Jóvenes Flamencos de Alcobendas”. Así, con esa sonrisa picarona e inocente que posee me pide que a través de estas páginas de Diario de Huelva anime a todos sus lectores para que la voten  dado que el voto se puede dar por internet o facebook. No le puedo dar una negativa a su petición y solicito a todos los que la siguen a través de este medio entren enhttp://alcobendasflamencanuevostalentos.org/artistas/cante/item/beatriz-romero. En el mismo se reconocerá a la mejor voz flamenca entre los jovenes y noveles cantantes, que se presente, del panorama musical actual.Cuando le pregunto que si después de los más de setenta premios nacionales que tiene en su poder y de los cientos y cientos de escenarios pisados, se siente con la misma ilusión que cuando empezó me mira con ojos sorprendidos y no duda en decirme que si se pierden los nervios antes de subir a un escenario o la ilusión de hacerlo lo mejor es dejarlo. Y no es su caso. Siente el mismo cosquilleo nervioso e idéntica ilusión. Porque siempre se da algo nuevo al público. Porque ella es una amante de mamar de las fuentes del flamenco, del estudio continuo y permanente de los grandes maestros clásicos del flamenco, de su métrica. Y hay que estudiarlos, analizarlos, ensayarlos, acoplarlos a su ritmo y voz. Es estudio y esfuerzo. A partir de ahí todo es distinto y nuevo. Nada tiene que ver un cante o una forma de cantar de un mes para otro. No se trata solo de madurez, que también, se trata, en definitiva, de mucho estudio y sacrificio.
Es tremenda esta Beatriz Romero por mi admirada. Por ello quiero jugar un poco con ella, quiero verla niña, mujer como otra mujer cualquiera y le pregunto qué cual sería su sueño en lo que respecta al cante. No duda en contestarme que cantar en la Bienal Flamenca de Sevilla y en Teatro Real de Madrid. Porque ella siempre piensa en positivo, no da paso atrás, siempre tiene nuevos alicientes. Y es por eso que le duele que se corra la voz entre circulos dañinos o dolosos que ha dejado el cante para dedicarse única y exclusivamente a los estudios. Y se me echa a reír para decirme que le digan eso de ella que tan a gusto se siente cantando unas buenas seguiriyas, aunque dependiendo de su estado de ánimo elige uno u otro palo.. Me grita entre carcajadas que no está retirada, que ahí están sus premios que lo avalan y las actuaciones y giras que la esperan. No obstante, va a terminar la carrera de Derecho porque hay que pensar en el futuro y que si el mundo del cante se termina por cualquier motivo hará oposiciones para Fiscal. No quiere vivir a dependientede nadie toda su vida una vez finalizada su licenciatura.
Y al decirme, ya tranquila y serena, con la guardia bajada, que en el futuro piensa casarse por la iglesia de la forma más clásica y tradicional del mundo y formar una familia, aprovecho para preguntarle qué canción le gustaría escuchar el día de su boda. No dudo ni un instante en decirme que unas bulerias de la cantaora catalana Mayte Martín. Beatriz solo desearte lo mejor del mundo porque el mundo debe de premiar a los buenos y los trabajadores, Y tú lo eres. Buena y trabajadora.