El corral político de la Pacheca

La expresión el Corral de la Pacheca la decimos cuando queremos expresar un lugar donde la confusión, el escándalo y el barullo abunda en demasía.

Si leemos el Tratado histórico sobre el origen y progresos de la comedia y el histrionismo en España, escrito por Casiano Pellicer el año 1804, podemos descubrir como en el Madrid de 1568 ya se representaban comedias en un corral que existía en la calle del Príncipe, que estaba regentado por un tal Burguillos.

Comedias y escándalo es lo que estamos viendo y sufriendo estos últimos días en la prensa y televisión. El trueque o venta de ayuntamientos entre partidos políticos parece un mercado de abastos, yo te apoyo aquí pero a cambio me cedes este Ayuntamiento, o como cambio de moneda me apoyas en el gobierno. Todo ello sin tener en cuenta, que están ahí porque hay ciudadanos que nos hemos tragado todas sus promesas, y además, porque nos decían lo que queríamos escuchar, después de unos años de sufrimiento y recortes por todos lados.

Unos han aprovechado estas circunstancias para pescar en aguas revueltas y la verdad es que han triunfado, otros han querido cubrir esa área tan importante para los votantes como es la cercanía y de la últimamente estábamos abandonados, otros ha acuñado palabras que quedaran y perduraran en el tiempo, pero si nos fijamos, todos y digo todos, han prometido todo aquello que queremos escuchar. Los corrales de comedias es eran teatros permanentes instalados en el patio interior de una manzana de casas, nuestros corrales políticos son semipermanentes, es evidente que su tiempo es el de las elecciones.

Meses atrás en nuestro país, debido a diversas circunstancias, se hablo mucho de la dignidad política. Si buscamos el significado de dignidad, nos encontraríamos muchas definiciones pero me quedo con una y es “la cualidad del que se hace valer como persona, se comporta con responsabilidad, seriedad y con respeto hacia sí mismo y hacia los demás y no deja que lo humillen ni degraden.

Si observamos lo que ha ocurrido estos días en el mar de negociaciones por la obtención de los ayuntamientos, podemos observar como lo que decían los partidos en las campaña no tiene nada que ver con lo que está ocurriendo.

Lo de la casta decían que no negociarían con nadie de esta clase que obtendrían el apoyo necesario para poder defender sus ideales sin embargo estamos viendo como estos ideales están cambiando o se han disipado, acoplándose a los de la casta.

El PSOE, aun recuerdo palabras de su líder decir que nunca negociarían con Podemos. Pero luego Sánchez, pretendiendo dar un giro a la izquierda para liderar lo que nunca antes habían liderado, los cientos de miles que votaron a Podemos y a Ciudadanos, dijo que él daría ese giro para dirigir a todos bajo su dirección.

Qué decir de Ciudadanos, partido que genero mucha confianza y esperanza, en el centro-derecha, partido que defendía y tenía como identidad la anticorrupción, ha formado y apoyado al PSOE de Andalucía, y al PP en la Comunidad de Madrid, ambos partidos limpios como una patena.

Y por último, y para que no se me mal interprete, la soberbia, la prepotencia y el alejamiento de los votantes del partido del gobierno han sido las circunstancias que han cavado su tumba.

No me gusta ser pesimista, y sé como todos los votantes, que estos integrantes del Corral de la Pacheca tiene una prueba de fuego antes de las nacionales, y nos podemos encontrar que los resultados de estos nuevos alcaldables, impuestos por el canje o trueque de sus partidos, lleven o bien al hundimiento total del partido del gobierno por el alejamiento de los ciudadanos, o por el buen hacer de estas nuevas fuerzas políticas al resurgimiento, de un nuevo movimiento, la voz del pueblo.

En definitiva cuando votamos dejamos un mensaje de esperanza en conseguir algo mejor, en decir basta ya a la corrupción, al tráfico de influencias, al que un político cobre 7 sueldos teniendo las misma horas al día que cualquier trabajador. Pero todas estas esperanzas, se pierden cuando vemos que al que votamos, negocia con aquel que en la campaña electoral le decía que ni agua.

Entiendo que la política no se construye desde la mentira, el engaño o las verdades a media. Aunque el resultado a corto plazo sea optimo, a largo plazo trae su castigo. Soy de los que piensan que el ejemplo, tiene una relación directa entre lo que se dice y lo que se hace, ¿Qué nivel de exigencia ejercemos a lo que no cumplen sus programas?, ya están en el poder y nosotros con nuestros ideales pisoteados.

Vivir con principios, mantener la dignidad y no perderla por un puñado de votos, no es tarea fácil, pero ahí está la dignidad política, no justificar lo injustificable.

Como economista, me hago una pregunta ¿de dónde va a salir el dinero o los recursos para cubrir las promesas electorales tanto de los partidos emergentes como de los tradicionales?

La promesas de Podemos, en materia de empleo, su máxima es la de igualar la rentas mínimas de inserción al SMI, en educación quieren suprimir el 3+2, priorizando la educación pública frente a la privada. Todo esto se va financiar, mediante una subida de impuestos para rentas altas, quiere eliminar las reducciones de Sucesiones y reducirá el mínimo exento en Patrimonio.

Ciudadanos quiere reducir de forma progresiva el IVA a cambio de suprimir el súper reducido. El establecimiento de una ayuda a salarios reducidos, y la implantación de un contrato único indefinido para nuevos contratos. Se quiere gratificar con un cheque la formación en las empresas.

El partido Popular sigue con premisa que aún queda mucho por hacer. Como apoyo al empleo su Plan de garantía Juvenil para menores de 35 años que no estudian ni trabajan. Amplían el ámbito de reducción de Sucesiones entre familiares directos y cónyuges, y reducirían el IBI.

El PSOE, reduciría el IVA cultural, reduciría el IBI. Derogaría la reforma laboral.

Entiendo que la política no se construye desde la mentira, el engaño o las verdades a media. Aunque el resultado a corto plazo sea óptimo a largo plazo trae su castigo. Soy de los que piensan que el ejemplo, tiene una relación directa entre lo que se dice y lo que se hace, ¿Qué nivel de exigencia ejercemos a lo que no cumplen sus programas?, ya están en el poder y nosotros con nuestros ideales pisoteados.

Pienso que todos merecemos una oportunidad, que el conocimiento y el escuchar a los demás enriquece, y es una prueba de madurez democrática, por ello creo que debemos dar tiempo al tiempo, y hacer un análisis de reflexión de lo que votamos y de lo que nos encontramos.

Vivir con principios, mantener la dignidad y no perderla por un puñado de votos, no es tarea fácil, pero ahí está la dignidad política, no justificar lo injustificable.