Piratas y peces decoran las paredes de Pediatría del Hospital Juan Ramón Jiménez
Los alumnos de la Escuela de Arte León Ortega concluyen la primera fase con un gran mural dedicado al mundo marino que llena de color los pasillos del área de aislamiento.
Alumnos de la Escuela de Arte León Ortega de Huelva han finalizado la primera fase de la decoración de la Unidad de Pediatría del Hospital Juan Ramón Jiménez, un proyecto de colaboración en el que se han embarcado de manera completamente altruista con la finalidad de llenar de color estas estancias hospitalarias haciéndolas más amigables para los menores.
Para el supervisor de Pediatría, Rafael López, “se trata de combinar la necesidades de asepsia y la sobriedad arquitectónica con el espíritu mágico e inocente de sus pequeños pacientes, en el marco del Proyecto de Humanización de la Atención Perinatal de Andalucía”.
Con esta idea, José Antonio Méndez, vicedirector de la escuela de arte y profesor de dibujo artístico, se ha tomado el proyecto como un reto personal “sentía que tenía que dar respuesta, sabemos lo importante que es soñar”, ha declarado. Para su desarrollo propuso comenzar por la decoración del área de aislamiento, en la que los menores permanecen hospitalizados durante un tiempo prolongado, trasladando a sus alumnos la generación de ideas y presentación de bocetos con las dimensiones del trabajo, siendo seleccionada la propuesta de Isabel Magro con la temática del mar.
Colores azules, verdes y amarillos, que generan calma y tranquilidad, han sido los elegidos en esta obra del mundo marino al que se han incorporado pequeños piratas y barcos de papel, una idea infantil y atemporal. Una obra en la que durante dos semanas han trabajado también generosamente José Santos, Manuel Martín, Cristina Moreno, Bartolomé Gómez, Ana Baldallo y Francisco Hidalgo, todos ellos alumnos del ciclo formativo de Talla y Ebanistería del centro, que han aplicado esmalte mate al agua en la decoración de un pasillo de 16 metros de largo y casi 3 metros de alto.
Isabel Magro, generadora de la idea, confiesa el reto que les ha supuesto enfrentarse a esas grandes dimensiones, además de estar pintando en un lugar asistencial, transmitiendo al mismo tiempo que “hemos sentido mucho apoyo de los profesionales sanitarios y de los menores. Saber que estamos ayudando a que los niños estén más a gusto viendo este mural ha resultado una experiencia muy enriquecedora”. Como curiosidad, los barcos de papel contienen una sopa de letras en la que se pueden encontrar los nombres de los artistas, de algunos profesionales y sobre todo de los menores que esos días se encontraban hospitalizados en la unidad.
Los profesionales de la unidad de Pediatría se han mostrado agradecidos y encantados con la primera fase del trabajo de este grupo de artistas, que se prevé que continúe con la decoración del servicio en el próximo curso escolar 2014/15.
